Pero, ¿qué hace que un buen profesional no triunfe en los negocios?
La respuesta es muy simple: Falta de conocimiento en gestión de empresa
Cuando un buen profesional decide crear su propia empresa, lo hace convencido de que tiene un buen dominio de su profesión, de los clientes y del mercado, pero una empresa es un ser vivo y como tal crece y se desarrolla y va adquiriendo necesidades nuevas, especialmente las relacionadas con la administración, la dirección y la gestión de la empresa, de las que probablemente no tenga muchos conocimientos.